¿Alguna vez te has preguntado a dónde van las letras cuando se acorta una URL? Bueno pues la realidad es que no se van a ninguna parte, se pierden.
"Una pena desperdiciar algo tan valioso"; afirman quienes han tenido la inicativa de este proyecto, para la educación de los niños de entre 3 y 12 años de la escuela de Santragrachi en Howrah, Calcuta.
Con este idea tan sencilla una ONG (Lights of hope) ha desarrollado un proyecto que tendrá como fin la edición de un libro.
No digo más, si se explica mucho se pierde el encanto, os dejo enlace (aquí) a la página que recoge la iniciativa, lo explica de una manera muy breve.
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